Curvado del vidrio y esqueletos

El curvado del vidrio es una de las operaciones más difíciles. El principal reto tiene relación con los problemas debidos a la fricción del vidrio contra las herramientas (esqueletos) empleadas durante el curvado. El perfecto deslizamiento del vidrio sobre los elementos del esqueleto es fundamental.

El vidrio puede estar en contacto con esqueletos recubiertos de tejidos técnicos, pero también con superficies metálicas (acero inoxidable, p. ej.).

Nuestros lubricantes secos se han diseñado de manera específica para solucionar estos problemas, en particular en el curvado de vidrio para automoción. Este tipo de aplicaciones para el bombeo se encuentran en parabrisas y lunas traseras.

También podemos encontrar aplicaciones de bombeo en la industria del vidrio arquitectónico.

Se utilizan en operaciones de bombeo del vidrio para:

  • Evitar arañazos en el vidrio;
  • Estabilizar el vidrio durante el curvado;
  • Lubricar mecanismos de las herramientas de curvado sometidas a altas temperaturas.

Estos productos se caracterizan por una adherencia notable a los soportes y una excelente resistencia a las altas temperaturas.